Del Desierto al Taller: Arena de Sílice para Chorro: El Abrasivo de Alta Eficacia
¿Sabías que una de las técnicas de limpieza industrial más comunes, el chorro de arena (sandblasting), nació de una simple observación en la naturaleza?
En 1870, el militar e ingeniero estadounidense Benjamin Chew Tilghman notó cómo la arena del desierto, impulsada por el viento, grababa el cristal. Inspirado por esta fuerza natural, Tilghman patentó el primer proceso.
El concepto era revolucionario: usar aire comprimido para disparar arena a alta velocidad.
¿Para qué sirvió esta invención?
- Rápida eliminación de óxido, pintura y corrosión.
- Preparación de superficies metálicas para recubrimientos (pintura, galvanizado).
- Grabado y texturizado de materiales duros.
¡Una idea simple que cambió la preparación y limpieza de superficies industriales para siempre!
La arena de sílice cristalina era abundante, fácil de conseguir y extremadamente económica. Su dureza natural la convertía en un abrasivo altamente eficaz. Gracias a estas características, la técnica se popularizó rápidamente en industrias clave como la naval y la metalurgia, mejorando su durabilidad y la vida útil de grandes estructuras.
La antigua máquina de chorreado con arena inventada por Tilghman en 1870, el inicio del sandblasting moderno.
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